PASCUA DEFINITIVA DEL PADRE CYRIEL DE PAUW - RELIGIOSO ASUNCIONISTA

LA FUNDACIÓN CYRIEL DE PAUW informa que el pasado miércoles 10 de Febrero de 2016 a las 5:38 p.m. nuestro fundador, amigo, maestro y guía, el Padre Cirilo, celebró su Pascua definitiva en la ciudad de Cali - Colombia.

Nacido en Londerzeel (Bélgica) en el año de 1933, el Padre Cyriel De Pauw a quienes amorosamente llamamos Padre Cirilo, una vez ordenado sacerdote y siendo miembro de la Comunidad Asuncionista;  llegó a Colombia lleno de expectativas, sueños, ilusiones, preguntas y un inmenso deseo de servir a los más pobres y necesitados.

Su vida entera, guiada por la luz del Evangelio y por ser un verdadero testigo de las enseñanzas de Jesús, a quien siempre tuvo en el "centro de su vida", lo condujo a trabajar con  jóvenes de Bogotá y Medellín que hicieron parte de la Juventud Estudiantil Católica (JEC) y la Juventud Obrera Católica (JOC)

Posteriormente, vino a Cali, donde pasó la mayor parte  de su vida y entrega, en la Parroquia San Nicolás, donde llevado por este mismo espíritu Cristocéntrico  creó en el año de 1974 junto con algunos entusiastas amigos, lo que durante treinta años se llamó "Cruzada de la Amistad", hoy "Fundación Cyriel De Pauw".

Más de 5 o 6 generaciones de niños y jóvenes del barrio San Nicolás hicieron parte de la Cruzada de la amistad, donde aprendimos que "todos somos iguales ante los ojos de Dios".

Los que lo conocimos y tuvimos el privilegio de gozar de su presencia, no podemos dejar de compararlo con un "sembrador".

El Padre Cirilo, llegó con los bolsillos repletos de semillas de amor, de solidaridad, de perdón, reconciliación, de amistad y de amor a Dios.

Semillas que fue sembrando y cultivando amorosa y cuidadosamente en cada una de sus acciones.

 Nos presentó a un Dios de amor, puso a Jesús en el centro de nuestras vidas y nos dio ejemplo con su vida de servicio y amor al prójimo.

Ahora que ha partido al encuentro con nuestro Padre Celestial, no tenemos más que palabras y sentimientos de gratitud por todo lo que nos enseñó, por todo el amor que nos entregó, por las profundas huellas que dejó con su vida y con su ejemplo; porque a pesar de no haber nacido aquí, hizo de América, de Colombia, de Cali, de San Nicolás, su tierra, su patria, su ciudad, su barrio; siendo entonces el más Colombiano, el caleño ejemplar con un gran sentido de pertenencia que no se limitó a "preocuparse" por las difíciles situaciones que atravesaban los niños y los jóvenes del Barrio San Nicolás y de Cali, sino que se "ocupó" por crear un espacio como la Cruzada de la Amistad para velar por los derechos, dónde formar hombres y mujeres capaces de servir a los demás, donde - como cualquier niño y joven-  pudiéramos  soñar, reir, desarrollar nuestras habilidades y talentos, conocernos a nosotros mismos, aceptar las diferencias, reconocernos "iguales en dignidad por ser hijos de Dios, distintos en nuestra forma de ser y complementarios para ayudarnos mutuamente".

Somos ahora más conscientes del enorme compromiso que tenemos para ser multiplicadores de las enseñanzas que el Padre Cirilo nos dejó, poniendo todo esto en práctica en nuestro diario vivir, en nuestros propios hogares, en la escuela, en el trabajo, en la calle, en el barrio o comunidad.

 

Llenos de la fuerza que nos deja su legado, nos sentimos más comprometidos  de continuar con su obra,  cuidando de los niños, niñas y jóvenes,sembrando y cultivando en ellos semillas de  amistad, de honestidad, respeto, amor al prójimo, servicio, coherencia, generosidad, gratitud entre otras; a esforzarnos día a día a pesar de las diferencias, de nuestras debilidades e imperfecciones a "habitar en la Casa del Señor".

Aprovechamos para agradecer a todas las personas que nos acompañaron el pasado Domingo 14 de Febrero en la Eucaristía que realizamos para despedir al Padre Cirilo con sus cenizas presentes; a todos aquellos que nos han escrito hermosos mensajes desde diferentes lugares del mundo, que sabemos que a pesar de la distancia, estaban acompañándonos con su pensamiento y corazón; al equipo de personas que cuidaron amorosamente al Padre en los últimos meses de su vida, un equipo que se convirtió en una extensa familia conformado por enfermeras profesionales y miembros de la fundación  que el mismo Padre Cirilo sintió como su familia. Enviamos nuestro saludo de cariño y apoyo a su familia  en Bélgica, a sus sacerdotes amigos; a sus amigos y amigas del alma y de toda la vida, que sabemos comparten nuestro sentimiento de amor y admiración por el Padre Cirilo.

DALE SEÑOR EL DESCANSO ETERNO

Y BRILLE PARA ÉL LA LUZ DE TU PRESENCIA.